Soraluze, en los años 60, era un pueblo que no le faltaba de nada para no aburrirse (influiría mucho la edad que teníamos en esos años). Teníamos río, monte y calle. El río y monte en primavera y verano, y la calle para todas las estaciones del año.
En el río nos bañábamos, pescaban, se hacían txabolas y balsas etc. También se hacían las hogueras de San Juan.
Cuando íbamos al monte, generalmente llevábamos la merienda, si era por la tarde, y hamarretako, comida y merienda si íbamos para todo el día. También participábamos en las excursiones organizadas por la SDP (Sociedad Deportiva Placencia), que consistían en salidas a pueblos y montes de Euskal Herria.
La calle tenía de todo; Frontón, Pórtico, plaza de Navarra, plaza del Tercio de Montejurra, Erregetxe, carameleros y barquilleros (los domingos).
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